Roy Lichtenstein
La exposición, a través de obra gráfica y objetos y otros elementos de creación artística, presenta un recorrido por los temas icónicos de la obra de Roy Lichtenstein, sin olvidar sus primeras obras, las que se inspiran en la arquitectura clásica, su relación con el cine, la música o el teatro, y las colaboraciones con otros artistas pop contemporáneos. Así, la muestra pasa por todas las etapas creativas de Lichtenstein, desde sus primeros trabajos de principios de los años sesenta del siglo XX hasta los que realizó dos años antes de morir.
Roy Lichtenstein (Nueva York, 1923-1997) es una de las figuras más importantes del arte pop norteamericano y es el creador de un lenguaje plástico característico de la cultura del cómic. Cuando era joven le gustaban los programas de radio, como Flash Gordon o Mandrake the Magician, y el jazz.
Lichtenstein estudió Bellas Artes en la Universidad de Ohio, pasó por el expresionismo abstracto y experimentó con el constructivismo, y a principios de los años sesenta del siglo XX rompió con estos preceptos y centró su mirada en la vida cotidiana, en un ambiente cultural dominado por la sociedad de consumo.
A partir de este momento, su producción se caracteriza por la apropiación de imágenes procedentes del mundo de la ilustración y la publicidad, y adapta la estética de la viñeta de cómic. En sus creaciones, bajo una aparente superficialidad, esconde una profunda aproximación conceptual al papel del artista y de sus creaciones en el mundo postindustrial.
En 1962 expone en la Leo Castelli Gallery de Nueva York. Poco después, empieza a trabajar en los dos temas que lo harán famoso: el amor y la guerra. En cuanto a las historias románticas, se basa en tebeos, como All-American Men of War o Girls’ Romances, que reproducían los estereotipos de género de la época. En cuanto a la guerra, Lichtenstein, que luchó en Europa contra el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, hace aparecer en sus obres aviones de combate, a menudo en posición de ataque, como en la reconocida obra Whaam! y en la serie «As I Opened Fire».
A partir de 1964 empezó a realizar paisajes, plácidos y vacíos, muy alejados de las obras sobre la guerra y el amor, aunque hay alguno que recuerda la estética del cómic. Con predominio del vacío y ausencia de tema, Lichtenstein aprovecha estas obras para experimentar con los materiales y los efectos ópticos.
A veces, se considera que las obras de Lichtenstein son parodias del expresionismo abstracto, que dominó el panorama artístico de los años cincuenta del siglo XX en Estados Unidos, con artistas como Jackson Pollock y Willem de Kooning. La serie «Brushstrokes», que es una reflexión sobre la verdadera esencia de la pintura, es un ejemplo de ello.
Lichtenstein también creó obras relacionadas con el postimpresionismo, el cubismo, el futurismo o el surrealismo en las que establece un diálogo, desde la admiración, con los maestros del pasado: Claude Monet, Fernand Léger, Piet Mondrian, Vincent van Gogh y, muy especialmente, Pablo Picasso, a quien consideraba uno de los pintores más importantes del siglo XX, además de ser la influencia artística más importante que había recibido.
El artista murió de forma inesperada en 1997, con setenta y tres años. Su legado artístico y documental se conserva en la Roy Lichtenstein Foundation, creada en Nueva York en 1998.
Roy Lichtenstein. The Scent of Tears
Organización: Made in View.
Coorganización: Aurea Cultura i Art · Comediarting · Rumor Artworks.
Comisaria: María Dolores Durán Úcar.
Roy Lichtenstein. More Than Dots
Organitzación: He Art Museum.
Coorganitzación: Aurea Cultura i Art · Comediarting · Rumor Artworks.
Comisaria: María Dolores Durán Úcar.