«Una cosa que me gusta de la traducción es que cada trabajo, cada día, es diferente. Otra es que puedo trabajar en Barcelona (en el caso de Aurea), en París o en Montreal, pero siempre con la sierra del Montsant delante de mi ventana.»
Mike H.
«Una cosa que me gusta de la traducción es que cada trabajo, cada día, es diferente. Otra es que puedo trabajar en Barcelona (en el caso de Aurea), en París o en Montreal, pero siempre con la sierra del Montsant delante de mi ventana.»
Mike H.